Aunque pueden encontrarse algunas experiencias de evaluación de la calidad de los programas de formación superior avanzada, de casi 50 años de antigüedad en Brasil, y experiencias más o menos sistemáticas desde hace casi 20 en países como Argentina, Colombia, Cuba, España y México. Considerada globalmente y aplicada de manera sistemática, la evaluación de la calidad del postgrado es un tema relativamente nuevo en el ámbito iberoamericano. En los países mencionados sólo recientemente se han aplicado programas de evaluación con carácter estatal y en otros muchos países ni tan siquiera existen experiencias sistemáticas de evaluación de la calidad en este ámbito de la educación superior. En este artículo se describe, sucintamente, la situación actual, se destacan las experiencias y prácticas más significativas, y se comparan distintos modelos de evaluación en términos de sus propósitos, objetivos y marcos de referencia conceptual u operativa. Se señalan además, tres tendencias en los procesos de evaluación: la primera, hace referencia a los continuados y, cada vez más frecuentes esfuerzos para asegurar, certificar o acreditar la calidad en todos los países. La segunda, es una tendencia para distinguir, por motivos prácticos el carácter de obligatoriedad vs voluntariedad de los procesos. Esto es, la conveniencia de distinguir entre aseguramiento y certificación o acreditación de la calidad. Por último, la tercera tendencia, hace referencia al surgimiento de nuevos criterios e indicadores de calidad, llamados eufemísticamente de “segunda generación”, en correspondencia con los cambios y transformaciones de carácter pedagógico que se presentan en los modelos de formación postgraduada
Though Brazil has been doing quality assessment for more than fifty years and countries like Argentina, Colombia, Cuba, Spain and Mexico have made continued efforts to define evaluation criteria, quality assessment of postgraduate degree programs, in particular master and doctoral degree programs, is a relative new topic in higher education in Iberoamerica. In fact, systematic definition and implementation of State evaluation policies is almost nonexistent in countries different from the ones mentioned above. This paper briefly describes the state of the art, emphasizing significant experiences and practices with respect to purposes, goals and conceptual or operative frameworks. Three trends are suggested: continued efforts towards emphasis on quality assessment for improvement, certification or accreditation purposes; a trend to distinguish between assessment for improvement and assessment for certification or accreditation purposes depending on whether participation is on a voluntary or a compulsory basis, and a trend to define so called second generation criteria for quality assessment according to new or emergent graduate education paradigms